Por Carlos Sánchez Fábrega
Desafíos y Resiliencia
En el umbral de un nuevo mandato presidencial, se vislumbran retos monumentales que aguardan al próximo líder de nuestra nación y así mismo a nuestros clientes las micro y pequeñas empresas.
Desde la estabilidad económica hasta la equidad social, la tarea de dirigir un país en constante evolución exige visión, coraje y un compromiso inquebrantable con el bienestar de todos los ciudadanos.
En este tiempo de incertidumbre y cambio, el pueblo deposita su confianza en quien asuma el timón del Estado, confiando en su capacidad para enfrentar los desafíos del mañana con sabiduría y determinación.
Bajo este escenario, en medio de la agitación económica generada por los desafíos mundiales y locales, las micro y pequeñas empresas en Panamá se enfrentan a una encrucijada sin precedentes.
A medida que el país lucha por mantener la estabilidad financiera, estos actores clave de la economía se han visto sometidos a una presión extrema para sobrevivir y adaptarse a un entorno empresarial cada vez más adverso, lo que se viene traduciendo en varias aristas.
Impacto Económico:
Las micro y pequeñas empresas, que constituyen la columna vertebral del tejido económico panameño, han sufrido un golpe significativo durante los últimos años.
Los constantes cambios de la economía durante la pandemia y posteriormente a la misma , han provocado pérdidas de ingresos, despidos y en algunos casos, el cierre permanente de negocios que no se recuperará.
Desafíos Agravantes:
Factores adicionales, como la incertidumbre política y las fluctuaciones en los precios de los productos básicos, han exacerbado la situación.
La burocracia administrativa de los programas públicos, han impedido la capacidad de recuperación de muchas micro y pequeñas empresas.
Además, consideramos que el nuevo presidente tendrá un reto sin precedentes ante la crisis de la Caja del Seguro Social, Crisis del Agua y bajada de la clasificación de riesgo del pais.
Innovación y Adaptación:
Sin embargo, a pesar de estos desafíos abrumadores, la creatividad y la adaptabilidad han surgido como armas poderosas para muchas empresas.
La implementación de estrategias innovadoras, como la digitalización de servicios, la diversificación de productos y la colaboración empresarial, ha permitido a algunos empresarios sortear los obstáculos y mantener la viabilidad de sus negocios.
Apoyo Gubernamental y Comunitario:
El gobierno panameño ha implementado una serie de medidas de estímulo económico, incluidos programas de ayuda financiera y exenciones fiscales, destinados a respaldar a las micro y pequeñas empresas.
Sin embargo, se necesita una mayor coordinación y agilidad en la entrega de estos recursos para garantizar que lleguen a quienes más lo necesitan de manera oportuna y efectiva.
El nuevo gobierno que salga después de la elecciones de mayo próximo deberá también trabajar rápidamente en definir una política de inclusión financiera de las mayorías , así cómo facilitar un entorno apropiado para las Fintech y las redes de pago eficientes necesarias para una real inclusión .
Perspectivas Futuras:
A medida que Panamá avanza hacia la recuperación económica, el papel de las micro y pequeñas empresas y los proveedores de servicios financieros y no financieros será crucial.
El próximo gobierno deberá tener un enfoque integral que combine políticas gubernamentales sólidas, apoyo comunitario continuo y una cultura empresarial resiliente para impulsar la renovación y el crecimiento en este sector vital de la economía.
En conclusión, la situación de la micro y pequeña empresa en Panamá refleja un paisaje complejo marcado por desafíos y oportunidades. Si bien la adversidad persiste, la determinación y la innovación están generando un rayo de esperanza para un futuro más próspero y sostenible.